Principales beneficios de la Industria 4.0

Reducción de costos: La industria logra reducir el presupuesto orientado al ámbito operacional, enfocar recursos hacia acciones de mayor valor que fomenten la productividad, dotando a la empresa de una mayor competitividad.

Aparición de nuevos modelos de negocio: La revolución 4.0 ha promovido profundos cambios en diferentes segmentos lo que ha conllevado a la aparición de nuevas oportunidades de negocio.

Operaciones en tiempo real: Una nueva característica de las “fábricas inteligentes” es el rápido procesamiento de la información posicionándose como otro diferencial relevante de la industria 4.0. Mediante la adopción de herramientas tecnológicas de inteligencia artificial, es posible monitorear los equipos de forma remota y en tiempo real aumentando así, la transparencia de los procesos y optimizando la disponibilidad de los datos.

Economía de energía: Reducción de costos en energía, son uno de los gastos más importantes a nivel industrial por lo que reducirlos se ha transformado en una obligación para los negocios que desean mejorar su eficiencia y conseguir una mayor rentabilidad.

Sostenibilidad: Al economizar energía eléctrica, reducir el uso de consumos en virtud del aumento de la eficiencia y promover en consumo de energía renovable, la industria 4.0 se ha posicionado como una aliada del desarrollo sostenido.

Disminución de errores y aumento de la seguridad: La reducción de la intervención humana en los procesos disminuye la incidencia de errores en las operaciones industriales, aumentando además de forma considerada la seguridad en cada una de las operaciones y disminuyendo el riesgo de accidentes.

Aumento de la productividad: La inversión en tecnología permite que se automaticen diferentes procesos promoviendo, una ejecución más ágil y precisa. También gracias al registro de datos y a su posterior análisis se pueden identificar puntos de mejora en cada uno de los procesos.

La automatización de tareas repetitivas posibilita destinar a los profesionales a realizar tareas más complejas, que realmente añadan valor para los resultados y que guarden relación con los objetivos del negocio.

Optimización de la eficiencia: Además de agilizar las tareas y fomentar la reducción de errores en la ejecución de los procesos, la industria 4.0 promueve la utilización de recursos de manera más consciente, inteligente y económica, lo que resulta en el incremento de la eficiencia operacional y en la mejora de los indicadores de desempeño del negocio.

A pesar de la necesidad de contar con recursos de tecnología de punta, es importante que los gestores planifiquen adecuadamente esta transición entre la era mecánica y el entorno innovador considerando la realidad del negocio principalmente en términos económicos y culturales.

Por lo tanto, para aprovechar todos los beneficios de la industria 4.0 es imprescindible preparar la empresa para los cambios, poniendo atención en la cultura y del clima organizacional, el potencial de los recursos humano, la gestión orientada por la innovación y contar con una comunicación transparente, todo ello puedes hacerlo de la mano de Instalaciones de Automatización y Mantenimiento (I´AM) De esta manera, el ingreso de la digitalización al medio industrial se convierte en un proceso mucho más ameno, motivador y efectivo.